El 20 de enero, hora local, Trump, que acababa de asumir la presidencia de Estados Unidos, firmó una serie de órdenes ejecutivas en la Oficina Oval de la Casa Blanca.Se anunció que a partir del 1 de febrero se impondrá un arancel del 25% a los bienes importados de Canadá y México. Además, Trump también anunció que impondría un arancel del 10% a todos los bienes importados de China.
El profundo trasfondo detrás del “palo arancelario”
consideraciones políticas
Al imponer aranceles a productos canadienses y mexicanos, puede demostrar su determinación de proteger la manufactura nacional en Estados Unidos, mostrar a los votantes que está cumpliendo su compromiso de "Estados Unidos primero" y ganar más apoyo. La promoción de grupos de interés relevantes también jugó un papel clave. Algunas industrias nacionales de Estados Unidos, como la siderúrgica y la manufacturera de automóviles, han enfrentado durante mucho tiempo la presión competitiva de productos de bajo precio en Canadá y México. Estos grupos de interés continúan presionando al gobierno para que tome medidas para proteger a las industrias locales. La política arancelaria de Trump es sin duda una respuesta a sus demandas.
angustia económica
La economía interna de Estados Unidos enfrenta actualmente muchos problemas y el déficit comercial se ha mantenido alto durante mucho tiempo, lo que se ha convertido en un importante punto débil en el desarrollo de la economía estadounidense. Trump cree que al imponer altos aranceles a los productos canadienses y mexicanos, puede reducir efectivamente las importaciones y reducir el déficit comercial. Además, también existe un desequilibrio en la estructura industrial nacional de los Estados Unidos. La proporción de la industria manufacturera ha disminuido gradualmente y se ha perdido una gran cantidad de puestos de trabajo. Trump espera utilizar los aranceles para obligar a las empresas a trasladar líneas de producción de regreso a Estados Unidos, promover la relocalización de la manufactura, promover el empleo y remodelar el panorama económico estadounidense.
control fronterizo
Trump ha utilizado los aranceles como medio para reforzar los controles fronterizos, citando la seguridad fronteriza. La frontera entre Estados Unidos y México tiene 3.145 kilómetros de largo, y la inmigración ilegal y el contrabando de drogas siempre han plagado a Estados Unidos. Trump afirmó que Canadá y México no estaban haciendo lo suficiente para frenar la inmigración ilegal y los flujos de drogas, y que los aranceles se impusieron para obligar a los dos países a fortalecer la gestión fronteriza y abordar conjuntamente estos problemas. él cree que ejercer presión a través de medios económicos puede impulsar a los dos países a invertir más recursos en el control fronterizo, reduciendo así el da?o de la inmigración ilegal y las drogas a la sociedad estadounidense.
?Cuál será el impacto de los aranceles adicionales?
El duro golpe a la integración económica norteamericana
Desde que el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) entró en vigor en 1994, ha promovido en gran medida la liberalización comercial y la integración económica entre Estados Unidos, Canadá y México. Los tres países han formado una estrecha cadena industrial y de suministro, con un alto grado de interdependencia. Sin embargo, las políticas arancelarias de Trump han impactado seriamente el TLCAN y su acuerdo sustituto, el Acuerdo Estados Unidos-México-Canadá (T-MEC), aumentando significativamente los costos comerciales y dificultando que las empresas comercien entre los tres países, socavando gravemente el establecimiento del acuerdo. orden comercial. La confianza entre Estados Unidos, Canadá y México se ha visto gravemente da?ada y las disputas comerciales entre los tres países han seguido aumentando. Canadá y México han expresado un fuerte descontento con la política arancelaria de Estados Unidos y han tomado contramedidas para aumentar los aranceles sobre los productos estadounidenses. Esto ha sumido las relaciones comerciales entre los tres países en una tensa confrontación y ha afectado gravemente el desarrollo económico estable de los tres países.
Se acerca el "frío invierno" en industrias afines
La industria automotriz ha sido la más afectada, y los fabricantes de automóviles estadounidenses han dependido durante mucho tiempo de piezas baratas importadas de México para reducir los costos de producción. Según las estadísticas, alrededor del 50% de las importaciones estadounidenses de autopartes provienen de México. Después de que se aumenten los aranceles, el costo de importación de estas piezas aumentará significativamente y los costos de producción de los fabricantes de automóviles aumentarán en consecuencia. Para mantener las ganancias, los fabricantes tal vez tengan que aumentar los precios de los vehículos, lo que debilitará la competitividad de los automóviles estadounidenses en el mercado internacional.
La industria energética también se verá afectada, ya que alrededor del 50% de las importaciones de petróleo de Estados Unidos provienen de Canadá. El aumento de los aranceles ha aumentado significativamente el costo del petróleo importado a los Estados Unidos. Esto no sólo conducirá a un aumento de los precios internos del petróleo en los Estados Unidos, sino que también tendrá una reacción en cadena en las industrias relacionadas que dependen del petróleo, como. como transporte, industria química, etc., aumentando los costes de producción de estas industrias y reduciendo la eficiencia productiva. La industria de productos agrícolas también se verá afectada. Los productos agrícolas de alta calidad de Canadá, como el trigo, la carne, etc., y los productos agrícolas especializados de México, como los aguacates, etc., aumentarán considerablemente después de que se aumenten los aranceles y el costo de los mismos. La compra de estos productos agrícolas aumentará para los consumidores estadounidenses y, como resultado, la demanda puede caer, lo que afectará la producción agrícola en Canadá y México.
"Obstáculo" para la recuperación económica mundial
Las fricciones comerciales provocadas por los aranceles han afectado gravemente las expectativas de crecimiento económico mundial. El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha advertido repetidamente que las fricciones comerciales conducirán a una desaceleración del crecimiento económico mundial. Dado que Estados Unidos, Canadá y México son economías importantes en el mundo, las fricciones comerciales entre los tres países se transmitirán a otros países y regiones a través de canales comerciales y cadenas industriales, lo que hará que el crecimiento económico global enfrente una mayor incertidumbre.
Respuesta dura: las “contramedidas” de Canadá y México
La “lista de represalias” de Canadá
Según noticias anteriores, ante la amenaza arancelaria de Estados Unidos, Canadá ha elaborado una lista de aranceles de represalia sobre productos estadounidenses por valor de 150 mil millones de dólares canadienses (aproximadamente 105 mil millones de dólares estadounidenses). Esta lista cubre muchas categorías, incluidos automóviles, bienes de consumo, productos químicos, maquinaria y productos metálicos, y representa casi un tercio del valor total de las importaciones canadienses de bienes estadounidenses. Una vez que la política arancelaria de Estados Unidos se implemente oficialmente, Canadá impondrá inmediatamente aranceles a los productos de la lista y podrá aumentar aún más los aranceles en función de acciones posteriores de Estados Unidos. El Ministro de Asuntos Exteriores canadiense, Jolly, dijo que no descartaría ninguna contramedida, incluido el posible corte de las exportaciones de energía a Estados Unidos.
La 'respuesta firme' de México
Anteriormente, después de que Trump dijera que impondría un arancel del 25% a los productos mexicanos, México ya había respondido. El presidente mexicano afirmó que defenderá firmemente los intereses de su país y no se quedará de brazos cruzados y permitirá que los aranceles estadounidenses da?en la economía mexicana. México planea imponer aranceles de represalia a algunos productos agrícolas estadounidenses, así como productos de acero y aluminio, para compensar el impacto de los aranceles estadounidenses en sus propias industrias. Al mismo tiempo, México busca activamente fortalecer la cooperación comercial con otros países, expandir los mercados internacionales y reducir la dependencia del mercado estadounidense. Además, México también está activo a nivel diplomático, coordinando su postura con Canadá y otros países afectados, expresando conjuntamente sus preocupaciones a Estados Unidos, tratando de incitar a Estados Unidos a reconsiderar su política arancelaria a través de canales multilaterales, y salvaguardar su posición y intereses en el comercio internacional.